Con cada vaso de alcohol acabas con cientos de células, pero eso no importa mucho, tenemos millones. Primero mueren las de la tristeza, así que estás sonriente, feliz. Luego, mueren las del silencio y todo lo dices en voz alta aunque no haya ninguna razón, aunque no tengan sentido, no importa, porque después mueren las de la gilipollez y hablas con inteligencia. Y, por último, las células de los recuerdos…Esas... esas son las difíciles de matar .
que linda entrada me gusto el texto.
ResponderEliminarLos recuerdos no se borran con nada!!
gracias por seguirme! te sigo, un beso enorme
- Mucccccchas gracias guapa :D
ResponderEliminar- Ni que lo digas Natasha,
uunbesote yo ya te he seguido también :)
me gusta mucho tu blog te sigo!
ResponderEliminarun beso
- Muchas graaaaaaacias, yo tambien te sig :D
ResponderEliminaruunbesote.
Woooooooooooooow! Increíble blog, de veras, me encantó^^ Te sigo por supuesto! Me gustaría mucho que tú también me siguieras si te gusta el mío :D
ResponderEliminarUn besito!
- Muchaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas graaaaaaaaaaaaacias guaaaaaapa :D
ResponderEliminar- yo tambien te sigo :)
uunbesote.